COMPLEMENTO A LA DECLARACIÓN PROPUESTA A FUSBEC POR OPCIÓN OBRERA PARA LA REUNIÓN DE UNETE EL 4 Y 5 DE SEPTIEMBRE
El país se está desmoronando desde el punto de vista económico.
Ahora bien, ¿se trata de rescatar al país?
Pero, ¿rescatarlo de qué?, o ¿rescatar a quien?
¿Rescatar a un socialismo que no existe o a un capitalismo que está en crisis?
A dos siglos del capitalismo en Venezuela, la ampliación y profundización de las políticas económicas, hoy arruinan al país.
¿Quiénes pueden contra él?
La respuesta: Los trabajadores
Análisis situación política social y económica del país
La actual crisis mundial se agudiza cada vez más. Tanto en Europa, EEUU y Japón, se expresan la caducidad y la bancarrota del capitalismo, en los países de la periferia económica capitalista pasa lo mismo, para sobrevivir conducen a la humanidad a cada vez más privaciones, desempleo, miseria, guerras, depredación ambiental. La resistencia y rebeldía de los explotados en todo el mundo plantea la perspectiva de gobiernos de trabajadores.
Venezuela tampoco escapa a la crisis económica, las condiciones para acceder a nuevas deudas o para emitir bonos empeora la situación. En el caso del ensamblaje de autos con una disminución del 84% respecto al 2013, indica de forma bestial que hay una recesión.
La situación productiva del país es terrible, sin guerra ni precios bajos del petróleo. Buena parte de la economía esta estatizada, y peor no puede ser su suerte.
Hay escasez de cemento y de cabillas con fábricas estatizadas hace varios años, de azúcar también estatizadas la mayoría de estas plantas, escasez de alimentos sobre todo la leche. .
¿De quién es la “guerra económica” contra el pueblo?
El populismo ha dilapidado la riqueza del país, sin estimular, sino todo lo contrario, la producción nacional. SIDOR no llega a un 25% de la producción de su capacidad, así mismo ALCASA y VENALUM, BAUXILUM no llega a 30%. Las que procesan el hierro, las briqueteras, no producen ni 20% de lo de antes, el oro de Minerven, igual. Tocoma ya tiene 4 años de atraso y más de un año totalmente paralizada, lo mismo sucede con el plan ferrocarrilero. La faja petrolífera también atrasada, ahora están buscando importar petróleo ultraligero desde Argelia para poder hacer las mezclas y hacer fluir el petróleo pesado, hay un sinfín de proyectos fracasados como la planta de tubos o la de taladros de perforación petrolera. Las respuestas del gobierno son empréstitos leoninos con monstruos como Chevron, Halliburton, ENI, Repsol, los chinos, los rusos, etc.
Adicionalmente, el ingreso al fisco es por la exportación de petróleo y por el pago de los impuestos, en realidad es sólo por la producción petrolera ya que los impuestos son un reingreso de parte del dinero proveniente de las transacciones comerciales y productivas no petroleras que funcionan porque se produce petróleo y las subsidia. La burguesía venezolana no puede ser más parasitaria.
Además de la inflación, déficit fiscal, los pagos de la deuda han disminuido las reservas a tal punto que para el 2014, debido al vencimiento de bonos, se requieren para el cuarto trimestre un desembolso de 6.000 millones de dólares, una cifra que Venezuela no tiene como se desprende del monto de las reserva liquidas al cierre del primer semestre.
La salida del gobierno es alargar el plazo de vencimiento de la deuda en este año, es decir hacer una restructuración y mientras tanto, para recuperarse impide que se efectivice las contrataciones colectivas, las viola por un lado e impide por el otro la renovación. Demás está decir que para acordar esta restructuración de la deuda, los acreedores le piden ajustes.
Por otro lado esta incapacidad, la falta de dólares, conduce a una recesión, ante lo cual las cifras del PIB del primer trimestre no hayan como maquillarla para revelar su resultado tan desastroso.
Balance de actividades nacionales e internacionales
El agravamiento de la crisis económica hace que las luchas se amplíen y se intensifiquen, aunque todavía las protestas se dan de manera aislada, con su excepciones como la marchas en Guayana en apoyo a los sidoristas, de varios sindicatos de la zona, entre otras cosas como respuesta a Diosdado Cabello, flamante jefe del parlamento que los amenazó y los llamó de mafiosos para arriba. Esto se dio teniendo a su lado al máximo cabecilla de la FBST, Wills Rangel.
Ante este espectáculo es imperiosa la necesidad de dar respuestas de conjunto, que le den cabida a todos los sectores de la clase obrera, ocupados, desocupados, tercerizados y eventuales.
La tarea del momento es un plan de lucha nacional por todas las reivindicaciones que respondan a la situación: el reconocimiento del derecho a la huelga: prohibición de suspensiones y despidos, reparto de las horas de trabajo sin afectar el salario; ocupación de toda fábrica que cierre o despida; inicio de las discusiones de la contratación colectivas vencidas, aumento de emergencia para trabajadores y jubilados, aumento mínimo igual a la canasta familiar y salarios indexados mensualmente. Derecho a la sindicalización, rechazar las intervenciones del CNE y del RNOS en las actividades sindicales, libertad plena a los trabajadores presos por luchar contra los patronos, el levantamiento de los procesos a todos los criminalizados y judicializados por ejercer su derecho a la protesta.
Mapa de conflictos a nivel nacional
La crisis se agudiza, el autentico sacudón no será más que un ajuste contra los trabajadores para seguir pagando una deuda que no cesa de crecer, una deuda por demás usuraria que el pueblo ni los trabajadores contrajeron.
La gran decepción que viven sectores populares se refleja en la resistencia y la lucha que ejercen intentando sortear los obstáculos legales que la burocracia del ministerio del trabajo les coloca como trabas para impedir sus logros.
Hay sectores que están en lucha permanente pero aislados los unos de los otros, mientras la política económica y su actuación antiobrera es similar por parte del gobierno. CORPOELEC, las empresas de Guayana, el sector cemento, la manufactura en todo el país, pero sobre todo en el cordón industrial con epicentro en Valencia. Con luchas permanentes como PETROCASA, SOUTO, autopartes, astilleros, alimentos como Galletera Carabobo, la mediana industria, los sectores tercerizados y los jubilados.
Los integrantes de los sindicatos afiliados a la FBST ajenos a cualquier lucha, más bien tienen como norte un paralelismo sindical y servir de muro de contención a las luchas, a veces ofreciendo migajas con el fin de que abandonen sus objetivos principales o como intentaron en el conflicto de SIDOR, primero Osvaldo Vera ofreciendo una brigada de esquiroles o como lo hizo Meléndez traicionando a los trabajadores en un montaje con personajes directos del ministerio y probados en la lucha contra los trabajadores como Elio Colmenares.
Estos son los resultados de la gestión gubernamental, en el caso de Guayana, el sector más combativo de los trabajadores en todo el país. Los beneficios salariales para los trabajadores de las empresas básicas de Guayana deberán ser aprobados por el Ministerio de Industrias, según informó el vicepresidente de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG), José Acosta Durán, en la comunicación VPE-N° 925-14 dirigida a los 18 presidentes de empresas básicas.
Tal es su situación, que el presidente de la CVG, Justo Noguera, informó que había sido autorizado a vender un activo de la CVG para cancelar la deuda.
Todos los partidos, desde la derecha tradicional hasta el gobierno, están comprometidos en esta política de ajuste salarial.
No se puede estar a la zaga de los sindicatos de la derecha, inclusive si quienes representan a la UNETE se expresan con sindicatos de base combativos a diferencia de esos sindicatos que tiene un apoyo mediático pero no tienen sindicatos de base.
La perspectiva la tiene el gobierno de los trabajadores, para la reorganización económica y social sobre nuevas bases no capitalistas. La consigna que recorre el planeta “QUE LA CRISIS LA PAGUEN LOS CAPITALISTAS, NO LOS TRABAJADORES” resume la necesidad de superar el régimen capitalista.