“Me lo dice o me lo pregunta”
Se que
no es con nosotros, es con los Ministerios de Defensa y Justicia, pero como es
público lo tomamos y le contestamos al compañero Casiano. Casiano Díaz es
compañero de luchas en FUSBEC, la Federación Unitaria de Sindicatos
Bolivarianos del Estado Carabobo donde también Opción Obrera participa.
A partir de su regreso
de Ginebra, en la reunión tripartita donde los gobiernos se ponen de
acuerdo de como legislar o mejor aun como regimentar al movimiento obrero,
Casiano Díaz[1]
se sorprende de la represión realizada por la Guardia Nacional Bolivariana
junto a grupos de choque civiles, paramilitares. Estamos de acuerdo con el
término, arremetieron contra los trabajadores de Petrocasa. Casiano parte del
objetivo en Ginebra, fueron a “un
duro combate en defensa de Venezuela en cuanto al respeto en nuestro país de
las libertades y derechos sindicales” lo cual
ahora nos sorprende porque es contradictorio con lo que aquí sucede. Fueron a
defender algo que no es cierto.
Mas adelante,
muy bien expresa que la lucha de clases se agudiza y afirma que del lado del
gobierno, y nosotros añadimos por tanto del PSUV, existe la derecha endógena. También
afirma Casiano que Chávez les ha tendido la mano y nosotros añadimos que se la
sigue tendiendo.
Vale la pena
denunciar que la llamada derecha endógena se ha convertido en una muletilla, o
mejor dicho, un comodín para un chivo expiatorio por cada acto de atropello,
corrupción y ventajismo que a diario y en toda Venezuela realizan los
representantes en el gobierno del PSUV valiéndose del poder que detentan.
La salvaje represión ejercida sobre lo trabajadores de
Petrocasa lo demuestra una vez más. Esto no es obra nada más de la
dirección de los encargados de la empresa, los que su vez son personal de Pequiven,
y los de la GNB, el Sebin y la Inspectoría del Trabajo de Guacara
coordinadamente. También han puesto su
grano de arena la Policía Nacional Bolivariana en Caracas demostrado
en la desviación hacia el Ministerio de Educación de los dos autobuses con
trabajadores que iban a denunciar a la Vicepresidencia de la República su
situación y los engaños desde allí o de los de Redes Sociales en Miraflores, por
decir los inculpados directos.
El compañero Casiano enfoca desde el concepto de clase
todo este suceso, por lo tanto también debemos decir una vez por todas que NO
HAY LIBERTAD DE EXPRESION si intentamos protestar como clase, si intentamos
luchar con criterios independientes y autónomos, y por el contrario vemos como
la oposición de derecha sí se expresa como le viene en gana.
El derecho es reclamar por nuestras condiciones de
trabajo y por aumento de salarios, que lo escribieron en la constitución y en
las leyes venezolanas y en los convenios internacionales; es un alcance
democrático que alcanzamos y que los mismos representantes del Ministerio del Trabajo
permiten violarlos por parte de a los patronos, tanto públicos como
privados, porque somos sus empleados.
También es necesario aclarar que la lucha de clases se
refleja a su interior en un partido revolucionario. Es posible que un sector de
él represente el reformismo, pero es inconcebible que, como sucede en el PSUV y
éste sea partido de gobierno, todos los puestos claves los tenga esta derecha
endogéna y suceda que hasta los representantes “obreros” dentro del directorio
tanto regional como nacional no sólo no hayan sido elegidos sino que no representan
a nadie.
Por último, y no menos importante, como existe y es
amplia mayoría esa derecha endógena lo menos que debemos hacer es denunciarla y
luchar por su renuncia.
FUERA
LA MINISTRA DEL TRABAJO Y SU REPRESENTANTE EN GUACARA, FUERA LA GNB DE LAS
INSTALACIONES DE PETROCASA.
FUERA
LA FASCISTA DIRECTIVA DE PETROCASA, SÓLO BAJO CONTROL OBRERO SE ENDEREZA LA
PRODUCCIÓN Y SE TERMINA LA CORRUPCIÓN, EL SABOTEO Y LOS ATROPELLOS.
REALICEMOS
UNA MOVILIZACIÓN CON LOS SINDICATOS COMBATIVOS Y SOLIDARIOS DEL ESTADO CARABOBO
HACIA LA INSPECTORÍA DEL TRABAJO PARA OBLIGARLA A QUE SE EJECUTEN LOS
REENGANCHES DE LOS TRABAJADORES QUE EL PATRONO NO ADMITE, Y QUE SE TERMINEN LOS
ATROPELLOS Y LA COACCIÓN PARA QUE LOS TRABAJADORES RENUNCIEN.
UN
GOBIERNO DE LOS TRABAJADORES SE ALCANZA CUANDO DERROTE Y DISUELVA AL EJÉRCITO Y
EL PUEBLO ARMADO LO RESPALDE.
José Capitán
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