La guerra en Ucrania y el Programa de Transición

 

La guerra en Ucrania y el Programa de Transición

 “Antes de agotar, o ahogar en sangre a 

 la humanidad, el capitalismo envenena 

 la atmósfera mundial con los vapores   

deletéreos   del  odio nacional y  racial.”

 

En esta guerra se hace necesario definir al Estado ruso antes que nada, y advertir que no es un país imperialista, el devenir de su restauración capitalista por parte de quienes por la izquierda lo catalogan así, deberían fundamentarlo y les preguntamos además ¿Cuándo se convirtió en un país imperialista? ¿Cómo sucedió eso?

La Rusia capitalista, proviene desde 1991 de un Estado obrero, en un mercado repartido muchas veces, tras dos guerras imperialistas, en algún momento debió, como mínimo, doblegar al imperialismo para poder instaurarse como igual.

Pero dejemos las ficciones, o mejor esa incongruencia, el Programa de Transición define al imperialismo como el dominio del capital financiero, en términos de Lenin. Hoy, según datos del Banco Mundial o The World Factbook (CIA), EEUU es el mayor país con Inversiones Extranjeras Directas (IED, en inglés FDI Foreign Direct Investment), a diferencia del capital ruso, representado en buena parte por oligarcas con depósitos en el extranjero, al mismo tiempo en la lista de los 15 primeros países en IED en  el mundo, 10 son europeos. Se corrobora así, quién es quién.

Por otro lado, luego de la debacle económica de la URSS, dirigida por su degeneración burocrática estalinista, tomamos estas palabras de Hilllel Ticktin, en una entrevista el 17 02 2022.

"Rusia hoy es heredera de esto: su productividad está entre las más bajas del mundo... La principal producción de Rusia es el petróleo, perdió toda su industria. Ni siquiera se puede hablar de ello en términos de transición. Tendría que reconstruirse antes de que pueda tener una transición a cualquier cosa. Por supuesto, sigue siendo transitorio en el sentido de que no es un poder capitalista exitoso. Si no tuviera las bombas atómicas que tiene, su poder sería mucho menor. No está creciendo, no va absolutamente a ninguna parte; si va a alguna parte, va hacia atrás. No estoy seguro de que pueda permanecer así por mucho tiempo. Si la demanda de petróleo cae y la producción se detiene, Rusia se encontrará en un tremendo problema, y ​​ahí es donde se dirige el mundo." https://commons.com.ua/en/intervyu-z-gillelem-tiktinom/?fbclid=IwAR1Nv_qmJHN27d4sPsIweRj-br63PbKAsOpgL3wR-CiWSLsHWL1OWkZRHtU7

Para el Programa de Transición

“El próximo período dependerá ante todo de su política en la cuestión de la guerra y el arte de apoyarse en la experiencia propia de las masas.” También comenta “Pero todos los países del mundo no son países imperialistas. Al contrario, la mayoría de los países son víctimas del imperialismo. Algunos países coloniales o semi-coloniales intentarán, sin duda, utilizar la guerra para sacudir el yugo de la esclavitud. De su parte la guerra no será imperialista sino emancipadora. El deber del proletariado internacional será el de ayudar a los países oprimidos en guerra contra los opresores... La derrota de todo gobierno imperialista en la lucha contra un estado obrero o un país colonial es el mal menor.”  respecto “(a) una guerra imperialista. El contenido fundamental de la política del proletariado será, en consecuencia, la lucha contra el imperialismo y su guerra. El principio fundamental de esta lucha será: ‘El enemigo principal está en el país’ o ‘La derrota de nuestro propio gobierno (imperialista) es el menor mal.’”

Como vemos, durante la guerra no se puede ser neutral, “contra la OTAN y contra Rusia”, tampoco podemos equivocarnos, en este caso buscando cómo hacer a Rusia imperialista. ¡Ah!, otro disparate de los neutrales, si algún país, entra en conflicto contra la tutela del imperialismo, debería ser antiimperialista para ser apoyado por ellos, de lo contrario, sigue la neutralidad.

“Sin dejar de sostener al país colonial y a la U.R.S.S. en la guerra, el proletariado no se solidariza, en ninguna forma, con el gobierno burgués del país colonial ni con la burocracia termidoriana de la U.R.S.S. (ahora convertida en pro oligárquica. Comentario nuestro) Al contrario, mantiene su propia independencia política tanto frente a uno como frente a la otra. Ayudando a una guerra justa y progresiva (en negritas, nuestra) el proletariado revolucionario conquista las simpatías de los trabajadores de las colonias y de la U.R.S.S. Afirma así la autoridad de la IV internacional y puede ayudar, por lo tanto, mejor, a la caída del gobierno burgués en el país colonial y de la burocracia reaccionaria de la U.R.S.S.”

 “la IV Internacional apoya toda reivindicación, aún insuficiente, si es capaz de llevar a las masas, aunque sea en un débil grado a una política más activa a despertar su crítica y a reforzar su control sobre las maquinaciones de la burguesía.” Programa de Transición

Para los que ven a Putin, un sátrapa, sanguinario -que lo es- recordamos en una entrevista a Trotsky realizada por Mateo Fossa, en septiembre de 1938

“Supongamos, sin embargo, que mañana Inglaterra entra en conflicto militar con Brasil. Yo les pregunto ¿con cuál del conflicto estará la clase obrera? Yo respondería: en ese caso estaría del lado del Brasil "fascista" contra la Inglaterra "democrática". ¿Por qué? Porque el conflicto entre los dos países no será una cuestión de democracia o fascismo…  Es necesario no tener nada en mente para reducir los antagonismos mundiales y los conflictos militares a la lucha entre el fascismo y la democracia. ¡Hay que saber distinguir explotadores, esclavistas y ladrones detrás de cualquier máscara que utilicen!”

Por último, no se puede sólo diferenciar dos “colores”, imperialismo y antimperialismo y si no hay antimperialistas, sino matices, justificar su neutralidad entre dos campos en lucha porque ambos tienen un carácter burgués. Esta distancia igual, para ambos lados no ayuda a madurar a las masas que vienen de muchos fracasos y traiciones, Sí esa lucha ocasiona una situación pre revolucionaria, se diluirían sus perspectivas, debido a la ausencia de una dirección revolucionaria que en vez de construirse se queda en recetas sectarias.

 “la crisis de la civilización humana, sólo puede ser resuelta por la IV Internacional.”

José Capitán

Opción Obrera